La esperada canonización del beato José Gregorio Hernández ha desencadenado un ambicioso plan de modernización en el estado Trujillo, con el objetivo de recibir a una gran afluencia de peregrinos tanto nacionales como internacionales. Este evento, de gran importancia religiosa y cultural, ha motivado a las autoridades locales a enfocarse en la mejora de la infraestructura clave, en particular, la adecuación del Aeropuerto Antonio Nicolás Briceño para manejar tráfico aéreo de carácter internacional.
El secretario general del gobierno de Trujillo, Julio Yépez Castro, ha confirmado que los esfuerzos están dirigidos a garantizar una conectividad óptima para los miles de devotos que se espera visiten Isnotú, lugar de nacimiento del llamado «médico de los pobres». Yépez Castro destacó: «Estamos adecuando todo lo que es la plataforma de comunicaciones», subrayando que el objetivo principal es permitir que la terminal aérea, actualmente restringida a vuelos nacionales, pueda flexibilizar sus operaciones.
La meta es habilitar el aeropuerto «de acuerdo con lo que establece la norma para que esos días puedan estar llegando aviones de otros países del mundo». Esto representaría un hito en la operatividad de la región, permitiendo una entrada y salida más fluida de visitantes extranjeros.
Estas acciones no solo buscan facilitar el acceso al estado Trujillo, sino también asegurar que la región esté preparada para esta celebración histórica. La expectativa es ofrecer una experiencia fluida y digna a todos los peregrinos, asegurando que los eventos conmemorativos se desarrollen sin contratiempos y con gran éxito. El enfoque en la infraestructura es un elemento crucial, ya que se espera una significativa movilización de personas con motivo de esta canonización.
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