En un acto de y desesperación, Juan Carlos Viloria, un comerciante del estado Trujillo que se encuentra en la clandestinidad por motivos de seguridad, difundio un video denunciando ser víctima de extorsión por parte de funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC).
Su denuncia, que ha resonado en diversos sectores de la sociedad venezolana, simboliza una alarmante manifestación de la corrupción arraigada en las instituciones de seguridad del país.
Viloria ha hecho públicas acusaciones severas, afirmando haber sido coercionado a pagar grandes sumas de dinero bajo la amenaza de muerte, lo que subraya la grave vulnerabilidad que enfrentan los ciudadanos ante los abusos de poder dentro de los cuerpos de seguridad.
Este caso, que retrata una realidad que muchos prefieren callar, visibiliza la urgente necesidad de abordar la corrupción en las fuerzas policiales que, supuestamente, deberían proteger a la ciudadanía.
El video fue difundido por el periodista César Guardiola, se ve Guardiola solicitando ayuda a los altos funcionarios de la policía, incluyendo a Douglas Rico, director del CICPC, y al propio Fiscal General Tarek William Saab,
La situación descrita por Viloria es un llamado de urgencia para que el Fiscal Tarek William Saab y los organismos competentes tomen medidas decisivas que no solo erradiquen este tipo de corrupción, sino que también promuevan un ambiente de transparencia y seguridad para todos los venezolanos.