El gobierno de Nicolás Maduro solicitó este martes a Estados Unidos y El Salvador información detallada sobre los migrantes venezolanos deportados el pasado fin de semana hacia el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) en El Salvador. Esta solicitud fue realizada durante una manifestación en Caracas, liderada por el chavismo, donde la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, instó a ambos países a proporcionar “acceso inmediato a la información” relacionada con los migrantes que, según su declaración, fueron “injusta e ilegalmente deportados”, según reportó Efe.
Rodríguez expresó que estos migrantes fueron “secuestrados en los Estados Unidos bajo la promesa de que regresarían a Venezuela, pero fueron entregados a una cárcel de máxima seguridad diseñada para la violación de los derechos humanos”. Asimismo, exigió el retorno “inmediato” de estas personas, a quienes Estados Unidos acusa de pertenecer supuestamente al Tren de Aragua, una organización criminal venezolana catalogada como terrorista por la administración de Donald Trump.
En este contexto, la vicepresidenta rechazó categóricamente que “el gentilicio venezolano sea asociado a factores como criminales, como terroristas”. Enfatizó que “Estamos ante violaciones sistemáticas de la legalidad tanto nacional del gobierno de los Estados Unidos como de El Salvador, así como de la legalidad internacional, que pretenden criminalizar la nacionalidad venezolana. Por eso nosotros decimos que Venezuela es digna siempre”.
Estas declaraciones surgieron luego de que el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, informara que el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, aceptó encarcelar a más de 250 migrantes venezolanos, quienes fueron enviados al CECOT bajo la Ley de Enemigos Extranjeros. Esta decisión se tomó a pesar de que un juez federal en EE.UU. había ordenado bloquear temporalmente el uso de esta normativa, establecida originalmente en 1798.
Advertencia sobre riesgos tras encarcelamientos arbitrarios
El gobierno venezolano emitió una advertencia a sus ciudadanos sobre los “riesgos y condiciones” que podrían enfrentar en EE.UU., subrayando que “se han documentado casos de detenciones arbitrarias, deportaciones sin causa justificada” y encarcelamientos sin debido proceso en cárceles de terceros países.
Simultáneamente, en Maracaibo, capital del estado Zulia, se llevaron a cabo protestas donde familiares de los detenidos exigieron su regreso y negaron cualquier vínculo con el Tren de Aragua.
Con información de Efe