El panorama venezolano ha capturado la atención nacional e internacional debido a un despliegue militar y policial sin precedentes en las calles del país, según lo manifestó María Verdeal, vicepresidenta del Movimiento Al Socialismo (MAS). La dirigente política expresó su inquietud por lo que considera prácticas de control desmedidas a medida que se acerca la fecha del 10 de enero.
Verdeal describió la situación como una fuente de incertidumbre y zozobra para los ciudadanos, quienes perciben un clima de tensión que, en sus palabras, «en condiciones normales», no debería existir. La dirigente destacó que «Venezuela no se acaba el 10 de enero», haciendo un llamado a centrar la atención en los días posteriores, los cuales, según ella, serán determinantes para el destino del país.
Aseguró que la gobernabilidad de la nación y la ya precaria situación económica y social podrían continuar afectadas en 2025, debido a la inestabilidad política actual. En su análisis, Verdeal criticó al gobierno por no abordar ni resolver problemas económicos y sociales fundamentales, como los salarios y la contratación colectiva.
En relación a la manifestación convocada por María Corina Machado para el 9 de enero, Verdeal recordó que la protesta pacífica es un derecho garantizado en la Constitución Nacional. Hizo un llamado al Estado para que garantice los derechos humanos durante estos eventos y advirtió sobre los riesgos de un posible enfrentamiento entre venezolanos.
Con respecto a la situación de Edmundo González Urrutia, Verdeal calificó de ilógica la intención de apresarlo cuando fue el mismo gobierno quien permitió su salida del país. Cuestionó la coherencia de las acciones gubernamentales al permitir que se fuera, a pesar de los cargos que se le imputan.
En el terreno legislativo, Verdeal criticó la ratificación de la junta directiva de la Asamblea Nacional, indicando que es la primera vez que un diputado repite consecutivamente todos los períodos como presidente, lo que refleja una falta de alternabilidad en el poder.
Por último, la dirigente rechazó el discurso del presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, por estar cargado de hostilidad y amedrentamiento hacia los ciudadanos. Afirmó que las leyes recientes aprobadas son subjetivas y violatorias de la Constitución, lo que añade más preocupación sobre el futuro legislativo del país.
Verdeal instó al gobierno a abrazar el diálogo y la prudencia como única vía hacia la estabilidad de Venezuela, subrayando que «la aniquilación no es el camino».
Prensa MAS