En un reciente anuncio oficial, el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, ha realizado graves acusaciones contra la oposición venezolana y algunos exmandatarios colombianos. Durante una rueda de prensa celebrada este lunes 20 de enero, Cabello afirmó que el Tren de Aragua, un grupo declarado como organización terrorista por el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habría recibido apoyo y financiamiento de figuras opositoras en el exilio.
Cabello señaló a varios destacados líderes de la oposición venezolana, incluyendo a María Corina Machado, Juan Guaidó, Leopoldo López y Julio Borges, como presuntos colaboradores de esta organización. Asimismo, extendió sus acusaciones a expresidentes colombianos como Andrés Pastrana, Juan Manuel Santos, Álvaro Uribe Vélez e Iván Duque.
Durante su intervención, Cabello no solo vinculó a la oposición venezolana con el Tren de Aragua, sino que también aseguró que la organización había logrado establecerse en Estados Unidos. Según sus declaraciones, esto habría sido posible gracias al apoyo de los expresidentes colombianos Iván Duque y Álvaro Uribe, junto a dirigentes opositores venezolanos como Leopoldo López, Julio Borges, David Smolansky, Miguel Pizarro y Carlos Vecchio.
El ministro también destacó que sectores «ultraderechistas» estarían involucrados en el financiamiento de la organización criminal, mencionando específicamente a Juan Guaidó y María Corina Machado. Cabello sostuvo que estos dirigentes habrían recibido fondos provenientes del «narcoparamilitarismo colombiano».
Estas denuncias surgen en un contexto de tensas relaciones políticas tanto a nivel interno en Venezuela como en las relaciones con Colombia. Aunque las acusaciones representan un aumento en la retórica oficialista contra la oposición, hasta el momento no se han presentado pruebas concretas que respalden las afirmaciones de Cabello.