El líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia ha denunciado que el régimen de Nicolás Maduro está utilizando el secuestro de su yerno, Rafael Tudares, como un medio de chantaje. Esta denuncia fue comunicada ante el expresidente colombiano Juan Manuel Santos y el expresidente del gobierno español Felipe González durante una reunión en Madrid. Ambos exmandatarios calificaron la situación como «vil y mezquina» en una declaración conjunta.
En el encuentro, González Urrutia también abordó la situación de los asilados en la Embajada de Argentina en Caracas desde marzo de 2024. Estos asilados, bajo la protección de Brasil desde agosto del mismo año tras la expulsión de los diplomáticos argentinos por el desconocimiento del gobierno de Javier Milei a la reelección de Maduro, enfrentan condiciones severas. «Les están dando trato de campo de concentración, cortándoles el agua, la luz y los alimentos», declaró.
Santos y González enfatizaron la necesidad de no bajar la guardia ante las «flagrantes violaciones de los derechos humanos y de todas las normas de derecho internacional en Venezuela».
Detención de Rafael Tudares y situación actual
La detención de Rafael Tudares fue reportada el 7 de enero, simultáneamente al arresto de siete políticos opositores, incluyendo al excandidato presidencial Enrique Márquez y Carlos Correa, director de Espacio Público, quien fue liberado posteriormente bajo medidas cautelares.
Según el exfiscal Zair Mundaray, Tudares fue presentado en tribunales la noche del 18 de febrero, imputándole los mismos delitos que pesan sobre el líder opositor González Urrutia, en calidad de cómplice. Mundaray informó que Tudares fue presentado ante el juez Eduardo Briceño, sancionado recientemente por Estados Unidos, y «asistido» por un defensor público.
Mundaray expresó que a Tudares le fue acordada la privación de libertad bajo una defensa pública que calificó de cómplice y que se habría manipulado la documentación para evadir la acusación de desaparición forzada.
Mariana González, hija de Edmundo González Urrutia, manifestó que su esposo está injustamente privado de libertad y se le niega la visita de familiares. «Durante 45 días ha sido víctima de una cruel e inhumana situación de desaparición forzada, que representa un grave crimen contra sus derechos humanos», afirmó, añadiendo su compromiso de luchar por la libertad de su esposo.
Estas declaraciones y denuncias ponen de relieve las tensiones políticas y los desafíos en el escenario internacional respecto a Venezuela, con acusaciones de violaciones sistemáticas a los derechos humanos bajo el mandato cuestionado de Nicolás Maduro.
El Nacional
