El gobierno venezolano, liderado por Nicolás Maduro, ha manifestado su deseo ferviente de convertirse en miembro pleno del grupo de economías emergentes conocido como BRICS. Las principales ventajas que subraya para lograr este objetivo son sus vastas reservas de crudo, consideradas las más grandes del mundo, y su privilegiada ubicación geográfica. Así lo comunicó la Cancillería venezolana en una nota difundida.
Coromoto Godoy, vicecanciller para Europa, argumenta que la adhesión de Venezuela no solo fortalecería al grupo, transformándolo en «la potencia petrolera y energética definitiva», sino que también facilitaría una diversificación de las fuentes de energía entre los países miembros. Actualmente, el grupo BRICS está compuesto por Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica, Irán, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Etiopía.
En relación a la proximidad geográfica, Venezuela se destaca por su acceso estratégico al océano Atlántico, lo que podría potenciar las conexiones económicas y comerciales entre BRICS y las regiones de América Latina y el Caribe. Godoy enfatiza que la entrada de su nación en este conglomerado podría representar una relación de «ganar-ganar», enviando un mensaje contundente de alineación con la paz y la búsqueda de alternativas frente a cualquier hegemonía.
Godoy, durante una conferencia virtual, mencionó que esta intención de Venezuela está en consonancia con uno de sus objetivos históricos: «contribuir al desarrollo de una nueva geopolítica internacional». La perspectiva de este desarrollo global es considerada esencial en el actual contexto geopolítico.
La reunión cumbre de BRICS está programada para llevarse a cabo en Kazán, Rusia, del 22 al 24 de octubre. Según informes del Kremlin, líderes de 24 naciones han confirmado su asistencia. Vladímir Putin, presidente de Rusia, resaltó recientemente que la contribución económica del bloque BRICS ya ha superado al grupo del G7, lo que refleja un continuo crecimiento.
El impuso de Rusia al establecimiento de BRICS se remonta a una propuesta hecha por Vladimir Putin para una reunión al margen de una sesión de la Asamblea General de la ONU en Nueva York, donde participaron ministros de asuntos exteriores de Rusia, Brasil, y China, así como el ministro de Defensa de la India. Esta alianza, aunque informal, busca ampliar su cooperación multilateral como contrapeso al orden mundial liderado por Estados Unidos y sus aliados occidentales.
fuente EFE