En respuesta a lo que considera una “situación de emergencia” y una “amenaza bélica” que afecta al país, el régimen de Nicolás Maduro ha implementado nuevas medidas extraordinarias en el ámbito de la salud pública. A través de un comunicado oficial, el Ministerio del Poder Popular para la Salud ha suspendido los permisos para el personal médico y asistencial de los hospitales designados como «hospitales centinelas», que incluyen el Hospital Universitario «Dr. Pedro Emilio Carrillo» de Valera, estado Trujillo.
La suspensión afecta a permisos como vacaciones, salidas por culminación de residencias y permisos para programas de estudio, con el objetivo de garantizar la disponibilidad operativa del personal médico ante las circunstancias excepcionales que atraviesa el país. La medida, que se aplica de manera inmediata, fue dispuesta por el régimen mediante el Decreto de Conmoción Externa N° 4.887, publicado en la Gaceta Oficial N° 42.723 del 29 de septiembre de 2025.
Según el comunicado emitido por la dirección del Hospital Universitario «Dr. Pedro Emilio Carrillo», la suspensión de permisos es parte de un esfuerzo para asegurar la continuidad de los servicios esenciales de salud en el país y la preparación ante lo que el gobierno califica como una situación crítica que pone en peligro la seguridad nacional.
Medidas para Garantizar la Estabilidad de los Servicios de Salud
El régimen de Maduro ha declarado que el propósito de estas medidas es enfrentar la emergencia nacional derivada de la situación política y económica del país. En este contexto, el Hospital Universitario «Dr. Pedro Emilio Carrillo» se ha convertido en un centro clave para la atención de emergencias y la prestación de servicios médicos esenciales en el estado Trujillo.
La dirección del hospital ha instado a todo el personal médico y administrativo a mantenerse atentos a futuras comunicaciones oficiales y ha agradecido la comprensión y el compromiso del personal ante esta medida extraordinaria. Además, la circular subraya que los hospitales centinelas, como el de Valera, son considerados vitales para el funcionamiento del sistema de salud durante esta crisis, y su disponibilidad es esencial para el control de la situación.
Este ajuste en las condiciones laborales del personal médico forma parte de una serie de medidas que el gobierno de Maduro ha puesto en marcha para enfrentar lo que considera una emergencia bélica interna y externa. A pesar de las dificultades, las autoridades insisten en que estos pasos son fundamentales para garantizar la protección de la salud pública y la estabilidad del país durante este periodo de crisis.
Espiga Noticias
