Cuatro meses después del 28 de julio, un complejo entramado de control político y social en Venezuela sigue siendo objeto de análisis y discusión pública. Javier Martucci, ingeniero químico y analista de datos, ha compartido a través de su cuenta @JMartucci un pormenorizado análisis sobre por qué el presidente Nicolás Maduro necesita que el tema de las actas electorales quede en el olvido. Según Martucci, estas actas revelan un trasfondo que incomoda al gobierno y expone las fallas de su estrategia de control.
¿POR QUE MADURO NECESITA QUE SE DEJE DE HABLAR DE LAS ACTA?
— Javier Martucci (@JMartucci) December 3, 2024
A 4 meses del 28 de Julio, se dice que ya lo de las actas pasó y que debe dejarse atrás el tema.
Pero aquí comparto algunas cosas que muestran el trasfondo de este resultado y la razón de que les incomode el tema
El Control Social y sus Mecánicas
Históricamente, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ha ejercido un control significativo coaccionando el voto en los sectores más vulnerables. Según Martucci, la administración de beneficios del Estado, como bonos, el CLAP, el gas comunal y la nómina pública, han sido utilizados como mecanismos de control social. Sin embargo, en los últimos comicios, esta estrategia no logró imponerse.
Martucci señala que el control se implementa en dos niveles: la violencia política, ejercida por colectivos y grupos violentos que amenazan a la población; y la extorsión de necesidades, donde la población es obligada a votar a favor del PSUV para acceder a beneficios esenciales. Sin embargo, estas tácticas no pudieron evitar que Edmundo Gonzales (EGU) ganara cómodamente en diversas localidades.
Estrategias Frustradas en las Elecciones
El análisis de Martucci destaca cómo, a pesar del control ejercido en lugares de alta influencia como Caracas y sus adyacencias a Miraflores, el 80% de las actas obtenidas mostró un apoyo significativo a EGU. Este fenómeno se repitió en otras regiones como Catia, El Cementerio, Macarao y San Agustín, donde la población no se dejó intimidar por la represión, prefiriendo evitar seis años más bajo el gobierno de Maduro.
La estrategia de control del PSUV también fracasó en instalaciones significativas como la Base Aérea Libertador y la Escuela de Guardias Nacionales Coronel Martín Bastidas Torres, donde los resultados no favorecieron al oficialismo. Las actas obtenidas de estos centros evidencian el desencanto y la resistencia de los votantes ante las presiones del gobierno.
\\\ \Esto mismo se vió en varias instalaciones que evidencian como el régimen perdió el control.\
— Javier Martucci (@JMartucci) \December 3, 2024\\
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Como las adyacencias de la Base Aerea Libertador (donde vota en su mayoría el personal de la Base que vive en los campamentos aledaños).\
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Se tiene acta de ambas mesas, Gana EGU por pela \pic.twitter.com/DWQta6IJtP
\\En Los Teques en la ESCUELA DE GUARDIAS NACIONALES CORONEL MARTIN BASTIDAS TORRES, donde se tiene elacta de las 3 mesas. Maduro gana este centro pero Edmundo Gonzales obtiene 460 votos.\
— Javier Martucci (@JMartucci) \December 3, 2024\\
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y tal parece que hubo 460 Regaños después… \pic.twitter.com/WL6HjqMyPj
El Papel de las Misiones Vivienda
Uno de los puntos críticos del análisis son las Misiones Vivienda, donde históricamente se ha ejercido una forma extrema de extorsión al amparo del PSUV. Las viviendas, administradas sin otorgar titularidad, son utilizadas como herramientas de control social, amenazando con desalojo a quienes no voten a favor del oficialismo. Sin embargo, en más de la mitad de estos centros, EGU resultó ser el ganador, reflejando una ruptura en la estructura de control.
La Urgencia de Olvidar las Actas
El 28 de julio se presentó un escenario político inesperado para el gobierno, revelando frágiles estructuras de control que no lograron su cometido. Cada acta que sale a la luz recuerda la falta de apoyo al régimen y su incapacidad para ocultar los verdaderos resultados. De cara al 10 de enero, Maduro necesita olvidar las actas, que se han convertido en un recordatorio constante de la verdad política del país. Martucci concluye que el deseo del gobierno de pasar página sobre este asunto es urgente, pero el eco de las actas sigue resonando en los pasillos del poder.