En una entrevista reveladora el pasado jueves, el empresario y exmarine estadounidense Erik Prince se unió a Norbey Marín en su programa «Hasta que Caiga la Tiranía» para discutir su postura firme contra el régimen de Nicolás Maduro. Prince no escatimó en elogios hacia los líderes opositores, destacando la valentía de María Corina Machado y Edmundo González, a quien calificó como «el candidato que ganó las elecciones para la gente».
Prince, conocido por su papel en la fundación de Blackwater, enfatizó la gravedad de la situación en Venezuela, afirmando que Maduro ha «robado tres elecciones» y subrayando la preocupación por el «cártel de pandilleros» que domina el país. Hizo eco de las recompensas de 15 millones de dólares por información sobre Maduro y 10 millones por Diosdado Cabello, señalando que «no es común que EE.UU. acuse a un jefe de Estado sin fundamentos claros».
Además, el empresario sugirió que la ley VERDAD, impulsada por el senador Rick Scott para aumentar las recompensas, podría tener apoyo en el gobierno de Joe Biden. «Va a ser difícil que le digan que no a esa ley», agregó, afirmando que las recompensas también están disponibles para los militares y patriotas venezolanos dispuestos a actuar.
Prince expresó su convicción de que existen suficientes patriotas dentro de las fuerzas armadas de Venezuela que podrían dar un paso decisivo hacia la libertad. «No se necesitaría mucho para desencadenarlo», aseguró, insistiendo en que la lucha por la libertad está más viva que nunca.
Defendiendo su campaña «Ya Casi Venezuela», Prince se distanció de las acusaciones de estafa, afirmando que su única intención es dar voz a los venezolanos que anhelan recuperar su país. «No tengo nada que ganar estafando al pueblo venezolano», dijo con firmeza.
Con una frase que resuena con fuerza, Prince concluyó: «No hay nada tan poderoso como una idea cuyo momento ha llegado, y esa idea es la libertad de Venezuela».
