La escasez de gasolina en Venezuela se ha intensificado de manera alarmante durante el mes de diciembre, afectando profundamente a varios estados del país. Esta situación se presenta en el aniversario número 20 del paro petrolero que forzó a Venezuela, entonces un importante exportador de crudo, a depender de importaciones de combustible, una necesidad que persiste hasta hoy.
El crítico déficit de gasolina ha obligado a los ciudadanos a formar largas colas para repostar en las estaciones de servicio, lo que revive los recuerdos de diciembre de 2002. Durante aquella época, la distribución de combustible se vio seriamente afectada cuando directivos de la estatal PDVSA se unieron a una huelga general promovida por la oposición contra el presidente de ese entonces, Hugo Chávez.
En el estado petrolero de Zulia, la situación es particularmente severa. José Hernández, un paramédico de 50 años, compartió su experiencia mientras esperaba durante horas para llenar el tanque de una ambulancia. “La escasez durante el paro fue ‘catastrófica’, casi como la que se está ‘viviendo en estos momentos’”, afirmó. Hernández explicó que había recorrido diversas zonas en busca de gasolina, encontrándose con estaciones colapsadas.
Portuguesa no es ajena a esta realidad. donde los municipios Páez y Araure también enfrentan una grave escasez de gasolina. De 16 estaciones de servicio en la zona, solo cuatro estaban operativas al cierre de esta emisión. Andrés Larrarte, un residente de Guanare, describió la situación como «horrible». «Ayer hice la cola por más de cinco horas y cuando me faltaban diez carros para surtir, se acabó la gasolina en la estación de servicio», comentó Larrarte, quien añadió que «hoy, 31 de diciembre, la gente amaneció en colas».
La ciudad de Maracaibo, capital de la región fronteriza con Colombia, está igualmente afectada. El alivio temporal experimentado el año pasado dio paso a un deterioro desde principios de diciembre, evidenciado por colas que superan los 200 vehículos, con tiempos de espera superiores a tres horas. Además, se ha implementado una restricción que limita el abastecimiento a 40 litros por vehículo.
Joel Sandrea, de 49 años, expresó que la situación actual “pega más duro” que la vivida hace dos décadas, destacando el costo de 0,50 dólares por litro de gasolina, comparado con el precio subsidiado y significativamente más bajo del pasado.
Este resurgimiento de la crisis de gasolina en Venezuela plantea serios desafíos para la población, evocando una época de incertidumbre y dificultades que parecía haber quedado atrás. La situación actual obliga a los ciudadanos a buscar soluciones creativas y enfrentar largas horas de espera, mientras la necesidad de una resolución efectiva se vuelve cada día más urgente.
Espiga Noticias -EFE