Román Camacho, reconocido periodista de sucesos, fue liberado después de más de 70 horas de detención en una sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) en el municipio El Hatillo, estado Miranda. A través de sus redes sociales, Camacho informó sobre su liberación en la madrugada de este viernes, indicando que la investigación aún continúa.
“Ya en casa… Aún la investigación continúa, no debo hablar sobre el caso, pero ya me encuentro en paz junto a mi familia”, escribió Camacho, expresando su gratitud por el apoyo y los mensajes recibidos durante su detención. Agregó que planea pasar el fin de semana junto a su familia para ordenar sus asuntos y continuar con su trabajo periodístico.
El Colegio Nacional de Periodistas (CNP) celebró la excarcelación de Camacho mediante una publicación en la misma red.
Camacho fue detenido el martes 4 de marzo en Caracas, siendo trasladado al mediodía a una sede del CICPC en El Hatillo. Según el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), la audiencia de presentación del periodista estaba prevista para el 5 de marzo, pero fue aplazada.
El SNTP denunció la detención como un nuevo ataque contra el libre ejercicio del periodismo, crucial para la democracia y la garantía de los derechos de acceso a la información y libertad de expresión. El gremio señaló que la judicialización de Camacho busca inhibir y silenciar a otros periodistas en Venezuela, destacando que el comunicador ya había recibido cuestionamientos por su cobertura.
La detención de Román Camacho estaría relacionada con su cobertura del asesinato en plena vía pública de Elizabeth Ariscua, de 64 años, en el sector José Félix Ribas de Petare, estado Miranda. El ataque, ocurrido durante las festividades de carnaval, fue perpetrado por sujetos armados que, disfrazados con máscaras, dispararon a la víctima antes de huir. Ariscua era vocera del concejo comunal Guayabal Bicentenario de la Zona 6, y las autoridades contemplan la venganza como un posible móvil, sin descartar otras hipótesis.
La excarcelación de Román Camacho ha sido bien recibida, aunque su caso destaca la continua presión sobre el periodismo en Venezuela, en un contexto donde la libertad de prensa enfrenta crecientes desafíos.
