La madre del gendarme argentino Nahuel Gallo, Griselda Heredia, ha hecho un emotivo llamado a Nicolás Maduro solicitando compasión para con su familia. Esta súplica se produce en medio de la detención de Gallo en Venezuela, un caso que ha capturado la atención internacional y que algunos consideran parte de una estrategia política del gobierno venezolano.
En una entrevista reciente con DNews, Heredia expresó su desesperación: “Es desesperante; espero que este señor Maduro tenga un poco de piedad con la familia, con una mamá que lo tuvo, que lo crió y que le dio todo lo que pudo para que sea un buen ciudadano”. Heredia describió la detención de su hijo como un “negocio jurídico” por parte del gobierno venezolano.
El caso de Nahuel Gallo ha generado controversia a nivel internacional. Según un informe del Wall Street Journal, se ha señalado que el gobierno de Maduro utiliza a ciudadanos extranjeros como moneda de cambio en negociaciones políticas o económicas. Esta táctica habría sido empleada anteriormente para la liberación de figuras clave como Alex Saab y familiares de Cilia Flores.
Gallo fue arrestado el 8 de diciembre de 2024 en la frontera con Colombia. El motivo de su ingreso a Venezuela era reunirse con su pareja e hijo, pero desde entonces ha estado bajo custodia venezolana enfrentando acusaciones de terrorismo y conspiración. Su madre rechaza estas acusaciones, asegurando que su hijo no estaba en ninguna misión oficial, sino que simplemente buscaba pasar tiempo con su familia.
Durante la entrevista, Heredia hizo un llamado a Maduro: “Que el señor Maduro diga: ‘bueno, si tengo un hijo, por más la situación que esté o que sea la de él, piense, por favor. Él también tiene una mamá, o la tuvo, y su mamá también le dio lo mejor para él,’” subrayó.
Las autoridades argentinas, encabezadas por el presidente Javier Milei, han calificado la detención de Gallo como un acto de secuestro. El 2 de enero, el gobierno argentino presentó el caso ante la Corte Penal Internacional, denunciando la detención arbitraria y desaparición forzada del gendarme como violaciones graves a los derechos humanos. También han solicitado medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Este caso pone de manifiesto las complejidades de las relaciones diplomáticas entre Argentina y Venezuela y plantea serias interrogantes sobre el uso de ciudadanos extranjeros en conflictos políticos. La comunidad internacional sigue de cerca el desenlace de este caso, mientras la familia de Nahuel Gallo clama por su liberación y regreso a casa.
