En medio de un creciente debate político en Venezuela, Macario González, abogado y exalcalde de Iribarren, ha expresado su firme postura en contra de la propuesta de reforma constitucional anunciada por Nicolás Maduro. González, quien es también dirigente de la Plataforma Unitaria Democrática en el estado Lara, considera que la actual Constitución ya satisface las necesidades democráticas del país y que cualquier intento de modificación busca consolidar el poder personal y partidista de Maduro.
El abogado subraya que la propuesta de Maduro, que sugiere la eliminación de 80 artículos de la Constitución vigente, es «innecesaria» y «sumamente grave». Para González, la intención detrás de esta reforma no es otra que debilitar los poderes públicos, un movimiento que recuerda al intento de reforma constitucional de Hugo Chávez en 2007, el cual fue rechazado por los demócratas en aquella ocasión.
González destaca que la actual Constitución, reconocida incluso por Chávez, ya proporciona un marco adecuado para la gestión pública que busca satisfacer las aspiraciones de la nación. Esta incluye paz, reconciliación, prosperidad económica y servicios públicos de calidad. Según él, el problema radica en que «Maduro detenta todos los poderes», y su propuesta de reforma solo refleja su incapacidad para abordar los problemas del país debido a la incompetencia de sus colaboradores.
El dirigente político insiste en que no hay necesidad de una nueva reforma, ya que la Constitución vigente define claramente la democracia, donde los poderes públicos funcionan con autonomía, como lo establece el artículo 136. La soberanía, según el artículo 5, reside en el pueblo y es intransferible, y se ejerce a través del sufragio universal, libre, directo y secreto, como lo dictamina el artículo 63.
González advierte que la propuesta de Maduro busca pulverizar lo que queda de los poderes públicos al intentar controlar todas las gobernaciones y alcaldías bajo el pretexto de un supuesto poder social y comunal. En respuesta, insta a los ciudadanos a defender la democracia consagrada en la Constitución de 1999, que protege los derechos de los ciudadanos, el respeto a los derechos humanos, la libertad económica y la alternabilidad en el poder mediante elecciones.
Finalmente, Macario González hace un llamado a recordar el rechazo del proyecto reformista de Chávez en 2007, cuando aún contaba con amplio apoyo. Ahora, subraya la necesidad de defender la Constitución frente a un gobierno que pretende mantenerse en el poder a pesar de su amplio rechazo popular.
IMP
