El gobierno de Nicolás Maduro manifestó su agradecimiento a Rusia este jueves por la «solidaridad y la comunicación constante» en respuesta al despliegue militar de Estados Unidos en el mar Caribe, cerca de las costas venezolanas. El canciller Yván Gil utilizó la plataforma Telegram para expresar su gratitud hacia los pares rusos y destacó la necesidad de respetar el derecho internacional, la autodeterminación y la soberanía nacional.
Gil también resaltó los «constantes esfuerzos» de Rusia para denunciar las «amenazas belicistas en el mar Caribe», que afectan directamente a Venezuela, mencionando los bombardeos a pequeñas embarcaciones civiles. Por su parte, Serguéi Riabkov, viceministro ruso de Exteriores, afirmó, según la agencia Interfax, que Moscú y Caracas mantienen abiertos todos los canales de comunicación en medio de la creciente tensión con Washington. Riabkov señaló que el despliegue de tropas estadounidenses es «injustificado» y que la responsabilidad de las tensiones recae únicamente en Washington.
El Kremlin, sin embargo, no se pronunció sobre un posible apoyo militar a Venezuela ante un eventual ataque estadounidense, mientras circulan rumores sobre una solicitud de misiles, radares y aviones por parte de Caracas. Entretanto, la administración de Donald Trump informó al Congreso que no tiene justificación legal para un ataque contra Venezuela, descartando incursiones en territorio venezolano dentro de su campaña antinarcóticos.
Secretarios estadounidenses, como Marco Rubio y Pete Hegseth, explicaron a los legisladores los pormenores de la campaña, que ha intervenido unas veinte embarcaciones en el Caribe y el Pacífico, vinculadas al narcotráfico, resultando en más de sesenta muertes. A pesar de que la operación antinarcóticos, iniciada en septiembre en aguas internacionales cercanas a Venezuela y Colombia, no contempla objetivos terrestres, fuentes de CNN indicaron que no se descartan acciones futuras contra instalaciones o líderes de carteles en Venezuela.
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