El gobernante venezolano Nicolás Maduro advirtió este lunes al mandatario electo de Chile, José Antonio Kast, que evite meterse con los migrantes venezolanos en ese país, en medio de los señalamientos que, asegura, el chileno está haciendo contra sus compatriotas.
“Usted podrá ser pinochetista convicto y confeso, pero cuidadito le toca un pelo a un venezolano, los venezolanos se respetan. ¡Cuidadito! Escúcheme bien, oyó, que el que se mete con Venezuela se seca y usted se puede secar aceleradamente, señor Kast”, dijo Maduro en su programa de televisión Con Maduro+, transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV).
Maduro criticó el discurso de Kast sobre los migrantes y sostuvo que estas personas tienen derechos que deben ser garantizados en Chile. “Deje quieto a quien quieto está”, insistió al referirse a las declaraciones del derechista sobre la población migrante, y afirmó que la Constitución chilena debe garantizar los derechos de estas personas.
En ese contexto, Maduro invitó a los venezolanos residentes en Chile a regresar al país y anunció un plan especial de apoyo para quienes deseen volver mediante el programa gubernamental Vuelta a la Patria. Explicó que esta iniciativa estará coordinada por la vicepresidenta Delcy Rodríguez y la presidenta de ese plan, Camilla Fabri.
“Si yo pudiera enviar 100 aviones para traérmelos en boletos gratis a toditos lo haría mañana, como nos estamos trayendo a todos los migrantes de Estados Unidos, liberándolos y rescatándolos del presidio (…) todo el que se quiera regresar tendrá nuestro apoyo decidido”, añadió Maduro.
Previamente, el gobernante venezolano había asegurado que el “nazifascismo” pretende “imponerse otra vez” en Chile, en alusión al triunfo electoral de Kast.
En la misma jornada, el dirigente venezolano Diosdado Cabello afirmó que la victoria de Kast en Chile se produjo por la “tibieza” con la que gobierna el actual presidente Gabriel Boric.
Kast, identificado como ultraliberal en lo económico, se convertirá en marzo en el primer pinochetista en llegar al poder en Chile tras el fin de la dictadura hace 35 años, después de imponerse en las 16 regiones del país y lograr la segunda victoria en segunda vuelta más amplia desde el retorno a la democracia, solo superada por la de Michelle Bachelet contra Evelyn Matthei en 2013.
Uno de los ejes centrales de la propuesta de Kast es la política migratoria. Durante la campaña centró su discurso en la expulsión de inmigrantes en situación irregular, aunque posteriormente moderó el tono y llegó a plantear que buscaba “invitarlos a salir” del país.
En su plan denominado Escudo Fronterizo, con similitudes a la política migratoria aplicada en Estados Unidos por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) durante el gobierno de Donald Trump, Kast propone la instalación de muros de más de cinco metros de altura, zanjas, drones con reconocimiento facial y radares térmicos.
El mandatario electo chileno también defiende el uso de la fuerza del Estado en los casos que considere necesarios en la frontera. Además, se comprometió a sancionar a los empleadores que contraten inmigrantes irregulares y a prohibir el alquiler de viviendas a este tipo de inmigrante.
EFE
