Durante la sesión, Maduro instó a la comisión a realizar un “debate amplio” e inclusivo con todos los sectores del país, buscando construir una propuesta que definió como “bella y perfecta”. El objetivo, según el líder chavista, es presentar esta reforma dentro del límite de tiempo estipulado.
Maduro detalló que la reforma incluirá el fortalecimiento del “poder comunal”, añadiendo una cuarta instancia de poder junto a las ya existentes: nacional, regional y municipal. Asimismo, aboga por una nueva sociedad fundamentada en los principios de la paz y una explícita protección contra cualquier “amenaza fascista”. Maduro enfatizó que estas amenazas deben ser sancionadas de la manera más draconiana posible.
El líder chavista también subrayó la necesidad de un “nuevo modelo económico diversificado” e independiente para Venezuela. La actual Constitución fue redactada por una Asamblea Constituyente convocada por Hugo Chávez y aprobada en diciembre de 1999, en un proceso con alta abstención. Desde entonces, ha habido intentos de reforma que no han prosperado, incluyendo la creación de una Asamblea Nacional Constituyente en 2017 que no llegó a cumplir su objetivo principal de redactar una nueva Carta Magna.
Este nuevo intento de reforma constitucional se produce en un contexto de crisis política y económica en Venezuela, lo que genera expectativas tanto dentro como fuera del país sobre el futuro del sistema político venezolano y su marco jurídico.
