En un clima de tensiones y denuncias, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, reveló que narcotraficantes han adquirido dos misiles con el propósito de atacar su avión, una afirmación que ha generado respuestas en la región. En respuesta, Nicolás Maduro, líder de Venezuela, instó a los ciudadanos colombianos a brindar su respaldo al mandatario colombiano en este difícil momento.
Durante su programa de televisión semanal, Maduro expresó: «Le pido al pueblo de Colombia y a todos los organismos en Colombia que acompañen al presidente Petro, que lo apoyen para que él continúe democráticamente dirigiendo los destinos de Colombia». Además, ofreció la «experiencia en inteligencia» de su gobierno para localizar a los presuntos responsables.
Maduro comparó esta situación con sus propias experiencias, al recordar intentos de atentados en su contra, supuestamente orquestados durante el mandato de Iván Duque. Según relató, una persona de nacionalidad colombiana fue capturada en las inmediaciones de un aeropuerto venezolano, y en otro incidente, se detectó una amenaza de disparo en los Andes de Venezuela. Maduro manifestó: «Yo le deseo al presidente Petro toda la protección de Dios, todas las bendiciones».
La denuncia de Petro ha causado conmoción, al afirmar que los misiles fueron comprados por narcotraficantes debido a su lucha contra «las grandes mafias» de Colombia. Durante la transmisión del mando policial al brigadier general Carlos Fernando Triana, el presidente colombiano enfatizó: «A mí me quieren disparar un misil, a mi avión. (…) Sabemos quiénes son pero hay que actuar».
Petro también destacó la implicación del Ejército de Liberación Nacional (ELN), al que calificó como una de las grandes mafias del país. Esta guerrilla ha sido un foco de conflicto, especialmente tras la suspensión de los diálogos de paz el mes pasado debido a la violencia en la región del Catatumbo.
No es la primera vez que Petro denuncia amenazas contra su vida. En septiembre, afirmó que la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) le había advertido sobre un plan para asesinarlo mediante un camión cargado de dinamita antes de finalizar 2024. Asimismo, en 2022, siendo aún candidato presidencial, denunció un intento de atentado por parte de la banda criminal La Cordillera.
El mandatario colombiano ha mantenido públicamente la presencia de amenazas y un posible golpe de Estado, recurriendo a sus redes sociales y apariciones oficiales para difundir estas advertencias.
Estas revelaciones y acusaciones han generado un entorno de incertidumbre en Colombia, mientras se intensifican los esfuerzos por identificar y neutralizar las amenazas en curso.