Nicolás Maduro afirmó el lunes que la exportación de alimentos será “la nueva fuente de riqueza nacional para divisas”, en un contexto de tensiones por el despliegue militar estadounidense en el Caribe y las recientes confiscaciones de dos buques cargados con crudo venezolano. El petróleo es actualmente la principal fuente de ingresos de Venezuela y se encuentra en el centro de una crisis marcada por nuevas presiones de Washington.
Durante una visita a una comuna agroproductiva en Caracas, Maduro aseguró que Venezuela se convertirá en “una gran potencia exportadora de alimentos”. En este escenario, destacó el papel de las organizaciones comunales en la producción de alimentos en conucos (huertos) y sostuvo que el país está preparado para asumir ese rol.
“Tenemos que empezar a producir alimentos puros, libres de químicos, que no enferman, y orgánicos al 100% porque, además, en el mundo están demandando alimento orgánico”, expresó el mandatario, al referirse al tipo de producción agrícola que, según dijo, podría impulsar la economía venezolana.
Maduro insistió en que Venezuela “será una potencia” en materia de producción y exportación de alimentos. “El mundo entero nos lo va a agradecer y nos los van a arrancar de la mano (los alimentos), y va a ser la nueva fuente de riqueza nacional para divisas”, señaló, al vincular esta estrategia con la necesidad de generar ingresos externos distintos al petróleo.
Las declaraciones se producen mientras el sector petrolero venezolano enfrenta una nueva fase de presión internacional. En las últimas semanas, el presidente estadounidense Donald Trump anunció el bloqueo de todos los barcos petroleros sancionados que entren y salgan del país, medida que ya se tradujo en la incautación de dos buques con crudo venezolano. Maduro ha calificado estas confiscaciones como “piratería” y sostuvo la semana pasada que el contexto actual representa una “prueba” para que el país se libere del petróleo y sea “más fuerte como economía”.
Paralelamente, Washington mantiene desde agosto un despliegue aeronaval en el sur del Caribe, cerca de aguas venezolanas, con el objetivo declarado de combatir el narcotráfico en la región. El chavismo interpreta esta presencia como “amenazas” y un intento de propiciar un cambio de régimen en Venezuela.
Trump indicó el lunes que habló “muy recientemente” con Maduro, aunque afirmó que la conversación no fue fructífera para rebajar la presión de Washington. En este marco, también se registró un ataque el miércoles a un muelle presuntamente utilizado por narcotraficantes, en medio de las operaciones que Estados Unidos desarrolla en el área caribeña.
El Nacional
