En un acto de denuncia pública, la líder democrática María Corina Machado ha alzado su voz para condenar la brutalidad ejercida por el régimen chavista al torturar a siete adolescentes del estado Carabobo. Estos jóvenes, que solo buscaban ejercer su derecho a la protesta al manifestarse contra el régimen de Nicolás Maduro, se han convertido en símbolos de la represión que afecta a toda Venezuela.
Machado, visiblemente conmovida, expresó en sus redes sociales: “¿Cuánta maldad puede haber en una persona y en un régimen para torturar a niños y jóvenes? No importa lo que hayan hecho; ¡y estos solo reclamaron su derecho a ser libres!”. Sus palabras reflejan el sentir de un pueblo cansado de la violencia y la represión sistemática.
La gravedad del caso ha conmocionado a la opinión pública, sobre todo después de que la jueza especializada en terrorismo, Keidimar Ramos Castillo, decidiera el pase a juicio de estos siete menores. Las declaraciones de sus familiares son desgarradoras, alegando extorsión y tortura, con evidencias tan contundentes como la pérdida de piezas dentales de los jóvenes.
Los jóvenes, aún recluidos en calabozos policiales de Carabobo, representan para Machado “nuestra razón de lucha”. En un mensaje de esperanza y solidaridad, la dirigente afirmó: “Mi corazón está con sus madres. Las abrazo con toda mi alma. Sanaremos sus heridas, físicas y espirituales; porque los vamos a liberar a todos”.
Este incidente, sumado a las múltiples denuncias de represión, ha generado una ola de indignación nacional. María Corina Machado subrayó la necesidad de visibilizar la situación y convoca a todos, desde jóvenes hasta militares, a enfrentar y erradicar este horror.
La dirigente culminó sus declaraciones con un mensaje unificador: “Venezuela está hoy unida en 7 vidas, con 7 familias que representan el dolor infinito de un pueblo, su solidaridad, su amor y su valentía”. Así, Machado llama a transformar el dolor en fuerza para luchar por una Venezuela en la que se respete la dignidad humana y se valore el coraje de estos jóvenes.
La sociedad venezolana se enfrenta una vez más al desafío de un régimen opresor, pero la resiliencia y el coraje compartido prometen ser las herramientas para enfrentar y superar esta trágica realidad.