Más de 90 familias y comerciantes del sector Chijos I, en la parroquia Timotes del municipio Miranda, se encuentran enfrentando una situación límite tras varios días sin servicio eléctrico. Este corte de luz es consecuencia de la explosión de un transformador, y mientras tanto, la comunidad permanece a la espera de una respuesta por parte de Corpoelec, la empresa estatal encargada del suministro eléctrico.
Kenny Maldonado, conocido dirigente social del municipio, ha confirmado que se han realizado las asambleas y se han enviado los reportes necesarios a través de las aplicaciones del Gobierno. Maldonado enfatiza que, dada la naturaleza crítica del problema, se espera una respuesta más rápida y efectiva por parte de las autoridades responsables.
La situación es especialmente grave para el sector comercial, donde las pérdidas son incalculables. Negocios que dependen de la refrigeración de sus productos están en riesgo de perder mercancía, lo que intensifica la urgencia de restablecer el servicio.
Además, incluso cuando el servicio eléctrico es restablecido temporalmente, la inestabilidad constante se convierte en una preocupación adicional para los residentes. La variabilidad con bajones y picos de voltaje amenaza con dañar artefactos y electrodomésticos, añadiendo a la lista de inquietudes de una comunidad que ya se siente al borde de la locura.
Los vecinos de Timotes claman por una solución que ponga fin a este problema que afecta tanto la vida cotidiana como la economía local, reiterando la necesidad de una respuesta gubernamental inmediata y efectiva.
