María de los Ángeles Lameda, viuda de Walter Páez, uno de los jóvenes que perdió la vida durante las protestas poselectorales en Carora, estado Lara, ha sido sentenciada a 28 años de cárcel, confirmó una ONG que sigue de cerca el caso.
De acuerdo con Alfredo Ramos, exalcalde del municipio Iribarren, Lameda, madre de dos hijos —uno de ellos afectado por el síndrome de Kawasaki—, fue detenida por agentes de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) el 3 de agosto. En ese momento, se encontraba cerca del Hospital Antonio María Pineda de Barquisimeto, buscando medicinas para su esposo. Páez había sufrido un disparo en el abdomen el 29 de julio mientras participaba en las manifestaciones cerca de la sede del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en Carora.
Ramos expresó en la red social X, conocida anteriormente como Twitter: «Sin piedad y con toda la crueldad que caracteriza a la tiranía fascista de Nicolás Maduro, condenan sin pruebas a 28 años de cárcel a la esposa de Walter Páez». Según las declaraciones, la sentencia se dictó sin considerar evidencias suficientes.
Walter Páez falleció el 4 de agosto, pero su esposa no fue informada de su muerte hasta el 7 de agosto, cuando recibió una llamada mientras estaba detenida.
Acusaciones de Terrorismo de Estado
Durante el juicio, Lameda no tuvo acceso a una defensa privada y fue acusada de terrorismo, incitación al odio y poder de arma ilícita. En consecuencia, sus dos hijos han quedado huérfanos y ahora están bajo el cuidado de su abuela.
Elisa Trotta, miembro fundador del Foro Argentino por la Defensa de la Democracia y de origen venezolano, denunció que en Venezuela se está produciendo «el peor terrorismo de Estado visto en décadas en la región». Trotta instó a la comunidad internacional, afirmando: «No podemos callar. No podemos mirar a otro lado. Alcemos la voz por María de Los Ángeles y por los miles de presos políticos. Alcemos la voz por la libertad de Venezuela».
El caso de Lameda pone de relieve la crítica situación de los derechos humanos en Venezuela y añade presión al ya tenso panorama político del país. Este incidente resalta las graves acusaciones de represión política y abuso de poder por parte de las autoridades venezolanas.
El Nacional
