Agricultores del municipio Turén han alzado la voz ante el visible deterioro del puente sobre el río Bocoy, una de las infraestructuras clave ubicadas en el sector El Jobal. Esta estructura se constituye como una de las principales arterias para la movilización de la cosecha de maíz, uno de los productos esenciales generados en el eje agrícola de Portuguesa.
Antonio Mosquera, experimentado productor de la zona, expresó su inquietud: «Nos preocupa la carga de maíz que estamos sacando, ya que se dificulta con la vía en esas condiciones». Para ilustrar la urgencia del problema, los agricultores han compartido imágenes donde se vislumbran fisuras significativas en la estructura del puente. En dichos puntos críticos se han colocado cintas de marcaje y seguridad con el objetivo de alertar a los conductores sobre los peligrosos agujeros, que pueden convertirse en trampas aún más peligrosas debido a la oscuridad que impera por las noches.
A pesar de las reparaciones menores que se han realizado al puente con frecuencia al inicio de la cosecha, el constante tránsito de vehículos pesados ha contribuido a un desgaste acelerado, advirtieron los afectados. En paralelo, se subraya la urgencia de reacondicionar la vía El Cruce-Caño Seco, ofreciendo así una alternativa al puente, particularmente para aquellos que se encaminan hacia Acarigua.
La situación es complicada por diversas variables: modificar la ruta implica mayores riesgos para la cosecha, escasez de combustible y un agravamiento del retraso en la entrega de la producción en los silos. Este panorama ya está siendo afectado por las fuertes lluvias que azotan la región.
Los productores puntualizaron que, al hacer público este asunto, no solo buscan mejorar sus condiciones laborales, sino también restablecer la indispensable comunicación con los caseríos de Turén y Santa Rosalía. La comunidad agrícola espera con urgencia una respuesta por parte de las autoridades para prevenir una crisis mayor en el suministro de maíz.