La ciudad de Guanare, capital del estado Portuguesa y primera ciudad fundada de la región, celebró el pasado domingo sus 433 años de existencia. En un esfuerzo por modernizar la infraestructura urbana, se inauguró un nuevo sistema de alumbrado que abarca más de tres kilómetros a lo largo de las avenidas Juan Fernández de León y Portugal.
Estas avenidas, fundamentales en la conexión entre el centro y el oeste de la ciudad, fueron equipadas con modernos postes y luminarias LED de 200 vatios. Este nuevo sistema de iluminación, diseñado para ser eficiente y duradero, utiliza más de 2.500 metros de cable triplex y cuenta con cajas eléctricas de última tecnología, dotadas de fotocélulas para el encendido automático.
El proyecto, realizado por la Alcaldía de Guanare, incluyó además una serie de mejoras urbanas como la demarcación vial, pintura de brocales, rehabilitación de paradas de transporte público y mantenimiento de áreas verdes. Estas acciones no solo embellecen el entorno, sino que mejoran la calidad de vida de los habitantes y visitantes de la ciudad.
El alcalde Óscar Novoa destacó que estos trabajos se financiaron con recursos procedentes de la recaudación fiscal. «Lo que se recauda en impuestos se retribuye automáticamente con mejores servicios para nuestro pueblo», afirmó durante la inauguración. Asimismo, enfatizó el compromiso del gobierno local con la transformación de Guanare en una ciudad cada vez más hermosa y pujante.
La celebración del aniversario incluyó una solemne eucaristía en la Basílica Catedral, oficiada por el Obispo Oswaldo Araque, y una ofrenda floral al Padre de la Patria en la plaza Bolívar, con la participación de autoridades civiles y militares. En el Centro Cultural Tomás Montilla se llevó a cabo una sesión solemne, donde la diputada Blanca Eeckhout, oradora de orden, junto al gobernador de Portuguesa, Primitivo Cedeño, fueron distinguidos con la Orden Fundación de la Ciudad de Guanare.
A través de estas acciones y eventos, Guanare reafirma su estatus como la Capital Espiritual de Venezuela, destacándose no solo por su rica historia y espiritualidad, sino también por su compromiso con el progreso y el bienestar de sus ciudadanos.