En el barrio Paraguay, los residentes han manifestado su creciente preocupación por un problema serio que afecta tanto la movilidad como la calidad de vida en la comunidad. Específicamente, en la calle 20 del sector, un persistente bote de agua ha generado una laguna, lo que ha provocado la obstrucción del paso vehicular y peatonal, convirtiéndose en un verdadero desafío diario para los residentes y transportistas.
Los vecinos, junto con conductores de diversas rutas, han alzado su voz para denunciar esta situación, haciendo un llamado urgente a las autoridades competentes para que se tomen acciones inmediatas. «Es un peligro transitar por aquí. No solo se dificulta el paso, sino que también se pone en riesgo la integridad de los peatones, especialmente de los niños y ancianos», comentó un vecino afectado.
Además de los botes de agua, los habitantes han señalado la preocupante existencia de huecos a lo largo de las calles del barrio. Estos representan un doble problema, deteriorando los vehículos y complicando el libre tránsito.
«Los huecos son una trampa para los vehículos. Hemos visto accidentes y daños en los automóviles a diario», lamentó otro residente.
El llamado de los vecinos es contundente: exigen a la Alcaldía y a los organismos responsables de la infraestructura vial que atiendan esta problemática con la urgencia que merece. «Queremos un barrio seguro y transitable. Esperamos respuestas y acciones concretas», concluyeron.
Los habitantes del barrio Paraguay confían en que su solicitud será escuchada pronto y se tomarán las medidas necesarias para restablecer el orden y la seguridad en sus calles, a fin de mejorar la calidad de vida de toda la comunidad.