Portuguesa.- Integrantes del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Venezuela (PCV), señalaron que con la celebración de las elecciones municipales del pasado 27 de julio en el país, se profundizó la crisis de legitimidad y el descrédito de las instituciones del Estado.
Oscar Figuera, Secretario General del Comité Central del PCV, afirmó que en Venezuela se ha consolidado un modelo autoritario que pretende sustituir la soberanía popular por la coerción y el miedo.
En este sentido, destacó que la legitimidad fue reemplazada por mecanismos coercitivos, pues acota que hubo trabajadores a quienes bajo amenazas se les obligó a participar en las votaciones municipales, al igual que muchas comunidades del país fueron chantajeadas con la entrega de bolsas de alimentos.
El dirigente comunista denunció que estas prácticas fueron acompañadas por una escalada represiva antes y durante los procesos electorales.
– La antesala a las elecciones estuvo marcada por la detención arbitraria de dirigentes sindicales en varios estados. Hoy, la presidenta del Colegio de Enfermería de Barinas permanece presa sin fundamentos legales. Esto mismo lo intentaron hacer con la presidenta del Colegio de Enfermería de Caroní, en el estado Bolívar, quien se salvó porque no estaba presente en su casa durante el procedimiento policial ilegal.
A eso hay que sumarle los casos de los dirigentes de Venalum y Fetrabolívar, quienes hoy están tras las rejas – aseveró.
Figuera advirtió que el terror se ha impuesto como política de Estado, lo que a su juicio ha generando un clima de persecución contra el movimiento obrero y popular.
Instituciones deslegitimadas
Con respecto al plano institucional, el Partido Comunista de Venezuela calificó de «desvergüenza» las actuaciones del Consejo Nacional Electoral (CNE), que eliminó de facto la publicación de resultados desagregados por mesa de votación, en abierta violación del marco legal.
Resalta que se han instaurado artimañas para manipular el registro electoral, como la creación de la categoría de ‘electores activos’, un invento que busca maquillar la realidad y mostrar una imagen ficticia del país.
Figuera aprovechó la ocasión para cuestionar la maniobra de la cúpula gubernamental para «mercantilizar el voto» en las elecciones municipales, al fusionarlas con una consulta para la asignación de recursos a comunidades.
Desde su óptica, estas consultas como una expresión del poder popular no son más que una farsa, dado que obligan a las comunidades a escoger entre una lista de carencias que de acuerdo a las leyes deben ser atendidas por Alcaldías, Gobernaciones e incluso el Ejecutivo Nacional.
En otro orden, el PCV también alertó sobre oos peligrosos caminos que promueven los sectores más reaccionarios de la oposición, encabezados por María Corina Machado.
Sobre esto opino que siguen insistiendo en una agenda basada en la intervención militar extranjera y la profundización de sanciones contra el país.
Destacó que la hoja de ruta de Machado además de fallida es criminal, porque ha causado sufrimiento al pueblo trabajador y ha agravado la crisis económica.
El dirigente comunista denunció que Machado de manera irresponsable sostiene una matriz de opinión que presenta a Venezuela como una amenaza para la seguridad hemisférica, abriendo paso a mayores niveles de injerencia imperialista.
Figuera ratificó que la salida a la crisis política y social en Venezuela debe construirse con la participación activa del pueblo trabajador, sin tutelajes ni imposiciones extranjeras.
Miguel Enrique Villavicencio