Portuguesa.- Los pacientes de la Unidad de Hemodiálisis SENECA en Acarigua manifestaron este lunes en la Avenida 32 con calle 23 del sector centro, reclamando nueva dotación de máquinas y equipos médicos requeridos para recibir una atención adecuada. Esta protesta refleja la preocupación creciente entre los pacientes que dependen de este centro para sus tratamientos de hemodiálisis.
Actualmente, la unidad cuenta únicamente con cinco máquinas, una cantidad insuficiente para atender a los más de 80 pacientes que acuden regularmente. La situación se agrava con el uso prolongado de estas máquinas, algunas de las cuales ya tienen más de 10 años de servicio y no están en condiciones óptimas para continuar operando.
En representación de los afectados, José Alexis Narváez Tovar hizo un llamamiento al Ministerio de Salud y a Nicolás Maduro para abordar con urgencia esta problemática. Narváez enfatizó que los pacientes deben dividirse en tres turnos para recibir su tratamiento, pero el deterioro de las máquinas no permite un tratamiento efectivo. «Dependemos de las máquinas. Si no sirven, la calidad de vida de nosotros se va para el piso», subrayó.
La situación pone de manifiesto la necesidad crítica de atención y recursos en las unidades de salud, instando a las autoridades competentes a tomar medidas inmediatas para garantizar una atención médica digna. Esta exigencia no solo refleja la condición de los pacientes renales en Acarigua, sino que también resalta un problema persistente en el sistema de salud que afecta a muchos en el país.
Los pacientes de la Unidad de Hemodiálisis SENECA continúan esperando una solución que asegure sus derechos a una salud óptima y de calidad.
Con información de RCN